El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, aseguró este martes que fuerzas militares de su país le propinaron "un ataque letal" a un "barco con drogas" que habría salido de suelo venezolano, según informara previamente el presidente Donald Trump.
"Hoy, el ejército estadounidense llevó a cabo un ataque letal en el sur del Caribe contra un barco con drogas que había partido de Venezuela y estaba siendo operado por una organización narcoterrorista designada", escribió el alto funcionario en su perfil de X.
Momentos antes, Trump divulgó la noticia en una rueda de prensa desde el Despacho Oval de la Casa Blanca y apuntó que "muchas cosas están viniendo de Venezuela".
🚨🇺🇸 Trump: EE.UU. ATACÓ un "barco con drogas" que salía de Venezuela"Hace poco atacamos una embarcación cargada de drogas, esto fue hace momentos, hace poco (...) el barco venía de Venezuela", comentó en una rueda de prensa en el Despacho Oval.https://t.co/xWdJ719yg7pic.twitter.com/l8qUxoEJQV
— RT en Español (@ActualidadRT) September 2, 2025
"Literalmente destruimos un barco, un barco que transportaba drogas, mucha droga. Y lo verán y leerán sobre ello. Sucedió hace unos momentos", sostuvo.
Ni el mandatario ni Rubio ofrecieron detalles acerca del lugar en el que sucedió el ataque a la embarcación ni tampoco cómo se determinó su punto de partida o se identificó al cártel que estaba a cargo del traslado de la droga. Previamente, el secretario de Estado estadounidense publicó en su perfil personal de X un críptico mensaje en el que aparecían una imagen de humo y otra de fuego, separadas por el signo igual (=).
A su vez, en Caracas pusieron en duda la autenticidad de las imágenes publicadas por Trump. El ministro venezolano de Comunicación e Información, Freddy Ñáñez, afirmó que el video fue creado mediante inteligencia artificial y que Marco Rubio "sigue mintiéndole a su presidente".
Datos
El despliegue militar estadounidense al sur del mar Caribe con el argumento de combatir el trasiego internacional de drogas, supuso una nueva cota de tensiones en las difíciles relaciones entre Caracas y Washington, luego de que el país norteamericano elevara de 25 a 50 millones la recompensa por información conducente a la captura del presidente Nicolás Maduro, al que sindica sin pruebas de liderar un cártel de narcotráfico.
A contrapelo de las afirmaciones de EE.UU., informes oficiales publicados por Naciones Unidas no ponen a Venezuela en el centro de la producción o distribución de sustancias ilícitas en el continente, ni siquiera en los últimos años. En contraste, es Colombia quien ostenta esa posición y son las rutas por el océano Pacífico donde tienen lugar las mayores operaciones de transporte de drogas hacia el norte del continente.
En decir de Pino Arlacchi, exdirector de la Oficina Antidrogas de la ONU y experto reconocido en el crimen organizado, los datos "cuentan una historia opuesta a la que difunde la administración de Trump" y permiten desmontar "pieza por pieza el entramado geopolítico construido alrededor del 'Cartel de los Soles', una entidad tan legendaria como el Monstruo del Lago Ness".
"El documento –de la ONU– no ha hecho otra cosa que confirmar los 30 informes anuales precedentes, que no hablan de narcotráfico venezolano porque no existe. Solo el 5 % de la droga colombiana transita por Venezuela", recalcó.
"La más grande amenaza"
En la víspera, Maduro aseguró que su país "está enfrentando la más grande amenaza" del último siglo, pues ocho barcos militares, un submarino nuclear y 1.200 misiles de factura estadounidense apuntan a suelo venezolano.
Recalcó asimismo que aunque Venezuela es un país cuya doctrina militar es estrictamente defensiva, está dispuesto plantarle cara a una eventual agresión armada. "Si Venezuela fuera agredida, pasaría inmediatamente al período de lucha armada en defensa del territorio nacional y de la historia y del pueblo de Venezuela", dijo en una conferencia de prensa con medios internacionales.
De otra parte, en la reunión extraordinaria de cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el canciller Yván Gil demandó "el retiro inmediato de los activos militares de EE.UU. del mar Caribe", al considerar que se trata de "una situación inédita desde la crisis de los misiles en los años 60, cuando se puso en riesgo la paz regional de una manera importante".