Las escuelas cerraron sus puertas en todo el país en solidaridad con la joven, que recibió dos disparos en cabeza y cuello por defender la educación de las niñas y criticar al movimiento Talibán.
Vigilias y manifestaciones se realizaron en todo el país en medio de fuertes condenas al ataque de parte de los líderes de Pakistán y la comunidad internacional. Los manifestantes marcharon por las calles de la capital, Islamabad, sosteniendo banderas con leyendas tales como "Avergonzaos, talibanes" y denunciando el ataque como "inhumano" y "bárbaro".
Las redes sociales y foros de Internet se inundaron con mensajes de pakistaníes que expresaban su indignación por las acciones de los talibanes y su admiración por Malala Yousufzai de 14 años de edad.
Malala se encuentra en condición estable después de que cirujanos extirparan la bala de su cuello el pasado miércoles.
"Al atacar a Malala, los terroristas no han comprendido que ella no es solo un individuo, sino un ícono de la valentía y la esperanza que reivindica a los grandes sacrificios que el pueblo de Swat y de la nación sufrió, para arrebatar el flagelo del terrorismo", dijo el general Ashfaq Parvez Kayani, oficial militar de alto rango del país, en un comunicado.